Un antes y un después.

La historia de mi vida, se reduce a ti. A esa persona morena de mejillas rosadas. Con grandes ojos, con gran corazón. Se reduce a esa pasión por el amor, a esa comprensión con miradas. La historia de mi vida, no es nada. Nada comparado con como habrá sido la tuya bajo una sonrisa forzada durante años. Bajo un vestido de boda arrugado, decorado con flores secas. Son días eternos con tu presencia cubriendo mi alma, pero con goteras. Goteras que me hacen llorar y gritar. Goteras que me hacen verte difuminada a mi vista y quererte. Aunque no lo demuestre. Aunque no dé fe de ello. 
Felicidades a todas y cada una de las madres, que hacen de un sueño nuestra vida.

Hoy me siento orgullosa, de saber que la amapola que mancha en mi campo, me ha dado la vida.
Hoy me siento orgullosa, de saber que la nube que nubla mi cielo, hará que la lluvia limpie mis penas.
Hoy me siento orgullosa, de saber que el camino de mi vida, no ha sido dibujado en línea recta, sino con mal pulso, para poder agarrarme a su corazón mientras camino.

No hay comentarios :

Publicar un comentario