A la musa de mis malas lágrimas.

Porque los vagabundos como nosotros, nena, nacimos para correr. (Bruce Springsteen) 
 


Vistes demasiado egocéntrica tus humos para joder tanto cuando nadie te llama, cuando apareces y no avisas. Cuando decoras mi cuarto de historias fantasma, de recuerdos para olvidar. De una lista interminable de pensamientos, que te encargas de tatuar en cada poro de mi piel. Tan arrogante como auténtica, disfrazas las sonrisas, transformas los momentos bonitos y los haces olvidar. Quedarse en un pozo sin fondo. Gritas sin que nadie te oiga, en lo más alto de un pedestal, y soportas las mil cargas de mi ánimo cuando lo único que quiero es explotar y te pido que te vayas. Y te quedas un rato más. Y otro, y otro. Y nos dan las madrugadas de un jueves cualquiera. De un jueves que en apenas un par de horas, volverá a colorearse y a llenarse de gente estúpida que no sabe adónde va. La madrugada de un jueves, y de un viernes, y Dios sabe qué madrugadas más. La del lunes, quizá. A las 4:36, mientras la última lágrima que provocas choca contra el suelo, cuando aquel semáforo da paso al último coche que corre por la ciudad, cuando por fin te alejas y dejas tranquila a mi soledad.

4 comentarios :

  1. Hola me gusta mucho tu blog, y me encanta como escribes, yo tambien tengo un blog, y tengo muy poquitos seguidores y a vces pienso que nadie lee lo que escribo..Bueno un besito de parte de http://lachicadelasmanzanasverdes.blogspot.com.es/ Espero que si te pasas pormi blog te guste :)

    ResponderEliminar
  2. sentí como que si eso lo hubiera escrito yo, me identifique demasiado

    ResponderEliminar
  3. Te secuestro. Te violo. Te abrazo. Y luego me explicas como consigues escribir así.

    ResponderEliminar
  4. Hola. Bonito pero tal vez muy negativo. Y tanto tiempo siendo negativo deja huella, no avanzas. Un abrazo.

    ResponderEliminar