Dime por quién mojas tus pestañas.

Dime por qué tu amor no crece hasta rozar la obsesión, o hasta perder la cordura. Dime por qué no sueñas dormida, ni vives despierta. 
Miremos siempre el mismo sol, y la misma luna. Miremos más allá del horizonte, saboreando esa capa de niebla que nos cubre. Descubramos el significado de la vida, mirando en los ojos del otro. Y perdámonos; entre parámetros desconocidos, entre tiempo ilimitado. Escribamos lo que nadie se atrevió a contar, lo que nadie se atrevió a preguntar; lo que tan solo nosotros sabemos. Soñemos con las olas, con el viento que nos mece. Dejemos que la lluvia barra tus lágrimas, y limpie mis heridas. Cerremos los ojos, y dejémonos llevar. Una corriente de electricidad, de aire o de mar, nos arrastre. Nos diga el camino que seguir para acabar, para dejar el juego a la mitad y escondernos. Dónde nadie pueda vernos.

3 comentarios :

  1. Que bonito de verdad, hay veces que mojamos las pestañas derramandolas en vano pero otras veces no.
    Besos y gracias por pasarte por comentar en mi blog :)

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  2. Es precioso, en serio :) Me gusta muchísimo el título, y la entrada en sencillamente espectacular <3
    Un beso. :)

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