Las cosas que te conté mientras esperábamos nuestro tren I

Teñir la vida de color azul debe ser como dormir en la recámara. Es ver pasar todo congelándose mientras las manos se te pegan a la lengua, y no poder correr porque tu azul se lo lleva el viento. Es como... tirar abajo un muro y que detrás no haya nada. Decepción pero alivio. Como romper un plato, pero que al chocar contra el suelo, esté intacto. Es como esa gente que pide perdón porque aspiran a dormir por las noches; y se pierden la vida de las seis de la mañana. Esa hora sí que es vida. Podrías desnudarme a y cuarto, y créeme que el protagonista sería el cielo. Y las nubes haciendo de persiana. Vida debe ser vivir siempre a las seis y veinte de la mañana. Con el cielo confuso y tú esperando a que te disparen. Aunque si hablamos de teñir de azul, siempre podemos subir a una terraza y echar un rato...

1 comentario :

  1. No conocía tu blog y me ha encantado el diseño, la tipografía (muchísimo) y el texto es precioso. Me ha encantado.
    Te sigo ahora mismo cielo, http://queenofyourdreams.blogspot.com.es/ ♥

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