Penny Lane is in my ears and in my eyes.
Nunca habéis visto
cómo se colorea el iris
antes de salir de casa,
ni cómo se aprende de memoria
su sonrisa por si la pierde.
Se lame los dedos después de,
con los labios de reina de corazones,
pero teniendo el suyo roto.
Escribe sobre mundos paralelos
donde el tú y el yo
son daños colaterales de un nosotros
que nunca ha sucedido,
donde no existen las segundas partes,
ni muchísimo menos
los te quiero, aunque...
Es una puta primavera en Enero,
con narcisos y amapolas
re-volviéndose en su pelo:
sabe cómo ser flor
en mitad del desierto.
Es como la primera vez
que no lloras
con una historia de amor a medias.
Como la necesidad de
hablar en plural,
y las ganas del monotema
en un mismo corazón.
Es el cómo que acaba
sustituyendo
al quién, y al dónde, y al ven.
Es una vuelta de falda
que no acaba nunca.
Dice que no cree en el amor,
pero sí en los terremotos
bajo el mar cuando aparece.
Habla de escalofríos,
y nunca
se ha sentido volar a ras del suelo.
A lo mejor es que sí cree en el amor, pero el amor no cree en ella.
ResponderEliminarMe ha encantado, así tal cual.
intenso. te sigo
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