-Aquí dentro llueve.-

Pero eterno será el verano tuyo, [...] cuando crezcas en versos inmortales.
(Shakespeare.)

<<He leído carteles en todos mis kilómetros, incluso de memoria podría ponerles melodía. 'Se busca por arte ilegal desde 1995'. Y tres años después, yo. Yo, y tu ego, y su tinta, y aquel domingo de otoño. Arte ilegal, palabras; pensamientos que fluyen en sangre mientras dices: 'aquí dentro llueve', y no señalas al techo de tu habitación. Tu corazón desborda y araña a cada latido.
(Y otros te llaman 'loco' por querer saber amar.)
En esos kilómetros, no quise aprender de la lluvia; pero lo hice, y mira mis ojos. Ojillos tristes, dijo alguien con el de la izquierda en reformas, con su vida a medio amueblar y más mentiras que promesas. La lluvia limpia, te deshace los nudos y te arranca los recuerdos (solo un instante). Te acaricia las entrañas y te dice: 'todo irá bien', pero te engaña.
Cada centímetro dolía más, y que el cielo refleje tu estado astromántico, tampoco facilita tus poesías. Pero parpadeas y sigues, tirando de la luna y su peso a cada paso; pisando con fuerza, cayendo, esperando. Y esperando todo pasa, tú te pasas y decides desesperar, cambiar(te el rumbo). Norte, sur y adiós puntos cardinales; sigues sin saber dónde estás, dónde estarás y dónde quedó la mejor parte de ti. En algún recuerdo muerto, o tras la pantalla de un ordenador que ya ni enciendes. Que apagas, para cumplir la ley del insomnio. Todo en la vida se apaga... te apagarás, y nadie se encargará de encenderte. Porque, realmente, no le importas (lo suficiente) a nadie.
De tantos y tantos kilómetros, aprendí, que Siberia solo existe cuando algo duele.>>

2 comentarios :

  1. Admiro tu forma tan perfecta de escribir. He tenido que leer dos veces para comprender un poco más de la mitad. Y lo que puedo decir es que no te falta razón en nada.

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  2. Hola. Cómo logras escarbar tan hondo? Cada vez que vuelvo disfruto más. Un abrazo.

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